Al igual que Bumblebee Generations, Onslaught me vino con las instrucciones:
A diferencia de las instrucciones del Autobot amarillo, estas son más pequeñas y simples, pero claras. Menciona tanto la transformación de vehículo a robot como los gimmicks que tiene.
Empecemos con la figura propiamente dicha. Este es el modo vehículo, un blindado antimotines:
El vehículo es enorme por ser clase Ultra. Muy bien representado y con detalles notables como remaches y la torreta giratoria de 180 grados. Si bien ya no es un vehículo de transporte, mantiene el par de cañones característicos del líder Combaticon. Tiene un par de gimmicks, en una de las ruedas hace un sonido de avance de vehículo pesado, aunque para activarlo hay que hacer rodar el blindado en una superficie accidentada y con baches.
El segundo gimmick son un par de luces y sonidos que se activan intercaladamente presionando el botón rojo de la torreta. El primero es un sonido de sirena y el otro son sonidos de disparos. Diferentes luces se prenden según el sonido que se active:
Mientras el sonido de disparos es bastante bueno, el sonido de sirena es un fiasco. Apenas un ruidito fugaz, sin opción a dejar el botón apretado para prolongar el sonido, como sí lo tiene el de disparos.
La figura cuenta con solo un accesorio, el escudo. Este se puede guardar en el techo de la torreta. Su colocación no impide presionar el botón para el gimmick de las luces y sonidos mostrados anteriormente:
Si bien esto es bueno para no tener piezas sueltas, la verdad se ve mejor sin el escudo encima. Según mi opinión, claro.
Para finalizar con este modo, puede desplegar un par de garras delanteras para combatir:
Solo comentar que en mi figura la garra derecha está algo floja y suele bajarse sola al mínimo toque. Es la única parte floja de esta figura.
Su transformación la primera vez es algo complicada ya que varias piezas quedan atascadas en el proceso, pero por suerte tenía el manual con lo que la cosa fue más rápida. Me gustó mucho la forma en la que oculta las llantas en las piernas. Por fin está listo el modo robot:
La figura es enorme y pesada, lo que es de esperarse de una clase Ultra. Las referencias al Onslaught G1 están muy claras en su cabeza y en los cañones de la espalda.
Tiene un botón en su brazo derecho con el que puede desplegar una pequeña arma:
El pequeño gimmick funciona perfectamente, pero la verdad se me hace muy poco armamento para un robot tan imponente como lo es este Onslaught (los cañones de la espalda no cuentan).
Mientras que en el otro brazo tiene un peg movible para colocar su escudo, como todo un agente antimotines pero malvado:
No se ve mal, aunque en este modo creo que el escudo queda algo pequeño. Me hace recordar mucho al dragón Shiryu.
El gimmick principal de esta figura son las luces y sonidos, y en el caso de Onslaught robot, enciende su visor en rojo al presionar el botón de la torreta, en la espalda:
Las pilas (que son del tipo AAA y no de reloj como pensaba) se colocan en un compartimento dentro del pecho del robot que queda totalmente cubierto por la pechera. Por suerte, mi figura ya las tenía incluidas.
Pese a su apariencia medio cuadrada y ladrillezca, esta figura está bien dotada. Cuenta con una posabilidad más que notable:
De hecho este Onslaught tiene casi todas las articulaciones estándar, salvo el giro de cintura. Se agradece la presencia de giro en las muñecas, cosa que obvian en muchas otras figuras del mismo tamaño. Carece de articulaciones de bolita. La mayor parte son de tipo ratchet, con el "clic" que suena al flexionar hombros, codos, rodillas y caderas, mientras que las restantes son de giro. Todas las articulaciones están firmes, sin nada flojo. Como me lo comentó el vendedor, sus uniones son duras ya que apenas lo transformó una vez y nada más. Eso se nota a la primera, pero la verdad no sé si seré capaz de no transformarlo varias veces solo por gusto...
Onslaught Universe es un homenaje más que digno del líder de los Combaticons. Enorme, posable y con electrónica incluida, no será una versión combinable pero su gran dureza de articulaciones y valor de juego hacen que valga cada uno de los 100 soles que costó. Menos no podía esperar de la figura más cara de mi colección. Ahora sí, me despido y Onslaught se va a descansar... ¡Ahí se ven!
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